domingo, 20 de julio de 2008

Cambio Climático

La fuerza de aquel viento no podría decir que fuera arrasadora. Era viento?, por su peso,…pero por sus efectos?.

Aquel soplo continuo y potente sacudió las cosas, se impregnó en ellas hasta desprender una cierta parte, comenzando por el color de los objetos.

Como un envoltorio era despegado de la forma, de la cosa a la cual correspondía y, amorfa pero unida, la repentina manchacromo, volaba por el aire a metros del suelo, hasta que interrumpía su trayectoria adhiriendo a otras formas y otras cosas, cercanas o lejanas que en su camino daban.


Había hojas bien verdes de un árbol frondoso. Fue tal el efecto de aquel soplo que el desprendimiento de color verdoso voló hasta adherirse en una casa de paredes blancas y dibujó ese mismo árbol grabándolo perfectamente en el muro. Quedaría el anterior, por un instante, transparente, hasta que algo también se adhería a él (colores rojos de una techumbre que viajaban a la deriva?, podría ser); además del color en su breve existencia invisible, dicho árbol, extravió, momentáneamente, su sombra. Los marcenos que en el se posaban, parecían adquirir algún extraño don que los mantenía flotando, denotaba, para los que se apresuraban en su juicio, algo de la evolución en estos pajaros que, serenos, permanecían sostenidos en lo alto sin apoyo aparente.


Repentinamente, el color negro de una vaca volaba hacia un horizonte cercanamente indefinido hasta que, una parte se adosaba a un auto y la otra a una heladería.

Un etiope rastafari ahora es blanco y su pelo brilla blanquecino, más en el trancito decolorante del fenómeno centrífugo fue el símil de un estampado de cebra. Un hawaiano preside Paris pero extrañamente detenta el mismo apellido que el antiguo gobernante. Como ven ahora, los rasgos también comenzaron a trasladarse y, acá estoy, el japonés soy yo. Es que el temporal perduro mas que algunos días, y de cada punto a sus antípodas los caracteres surcaron caprichosamente nuestro pequeño y climático mundo.


Algunos fóbicos a este viento de traslación permanecerán, esclavos de sus tribulaciones, encerrados por largo tiempo. Pero muy sorprendidos se verán al salir. Solo imaginen que para quienes siempre estuvimos fuera y experimentamos este revolucambio las cosas fueron sorpresivamente desconcertantes, de dislocante acción. Increíbles cabezas de cuatro orejas, alguna que otra persona, y sin ninguna alguna otra. Fue raro como ver caras con la nariz al revés (orificios en medio de los dos ojos) con total normalidad, y decir, buen día señor Picaso. Radioscopia de innovación.


Que manera de disfrutar para algunos. Verán casas y contrucciones como Gaudianos collages de colores e imágenes.


Variación. La tierra es color verde y el césped color dorado (como la arena , pero continua siendo césped…solo que su color se adoso). Un pato se pasea con su pico sifón; la jirafa, altísima permaneció, pero es de color celeste; un caballo con melena de león; oso panda con largo cuello de tortuga y un panda pony, panda punk; los árboles de plumas, pájaros de hojas verdes bien combinadas que aumentaban su tamaño cuando llovía. Habría muchas cosas que entender. Un nuevo Atlas Universal de las especies.


Zoológica confusión, irrmediable hasta las cejas disparadas sobre el flequillo…


Puedo seguir con las transformaciones


Un limón, color y felpa de ardilla... era de lo mas extraño! y difícil fue acostumbrarse, .Los que mas rápido se adaptaron a estas naranjas nuevas fueron los australianos, que con los kiwis tenían una fruta acariciáble que algunos ofrecían en el menu. Y tornaba todo mas raro por que era solo esto, pero su sabor seguía siendo muy bueno


Es decir, a continuación se establecería una confusión ontológica, hasta funcional, y cuasietnológica.

Las unicas cosas que perduraron fueron cosas esenciales o las muy incorporadas como los comportamientos. El resultado de todo fue: semipersonajes, semiparecidos a otros con sus comportamientos generacionales propios altamente arraigados, pero a la vez la tortuga lenta felpuda que miró su reflejo en el agua y no entendió porque los ositos pandas le chupaban las orejas como cáñamo fresco…… …tal fue así que fueron … un edén, para quedar con dos ojos abiertos………., o tres?!!

jueves, 10 de julio de 2008

Fix


Cuan pequeño y distraído fue aquel olvido, al que el chef del hotel rápida solución dió y donde el extraviado dedo gordo del pie iba, un champignon lo remplazó.



Nada en particular

o todo en general, o minimo, a la inversa:
Me levanto tras haber dormido exactamente 7 horas y 43 minutos con 30 segundos..,,acto seguido comienzo a desperezarme, cuestión que me lleva entre 15 o 20 minutos de los cuales no puedo dar mas precisión ni siquiera en el tiempo verdadero porque estoy medio dormido, mientras preparo el te, uso 5 como la propaganda, dos para las tostadas, 1 y medio para untarlas y 8 para comerlas, mientras, ojeo un poco la tele,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,, Justo a la espera del subte, 56 sombreros y 30 camperas aguardan al igual que yo la formación de 7 vagones conducida por un conductor que aproxima mas de una pena..pienso que el tren viene lleno, tarda 5 segundos en arrancar, los decibeles de 35 puntos bailan en mis oídos, pongo el tema 15 del disco y me sumerjo en aproximadamente 2 mares Celsius de sonidos...mis ojos se desprenden cerca de 1000 metros del subterráneo por donde voy viajando, cuando colgado allí cerré los dos y en un pensamiento fluido me escapooooo, si señores!, una frecuencia de 14 wtzs momentáneamente interrumpe mis meditaciones de las manijas del subte, anuncia 10.045 hectopascales que a la hora de llover van a ser aproximadamente 679800 gotas cayendo de costado en un metro cuadrado de 100 cm. exponenciales..anuncian 300 paraguas dados vueltas y ya se fuga la interrupción…. Sueltan luces los 8 vagones que cruzan ahora mi tren que va al sur..el que va al norte lleva 300 humanos, 2 venusinos, y viajan allí dentro cerca de 976 botones sin galeras ninguno de ellos, no ni siquiera el chofer.

miércoles, 2 de julio de 2008

it!s a ................. life !!!



Bajó del edificio y, masivamente, las tuberías a cielo abierto de la calle Córdoba eran atiborradas de autos y ruido, el dial mal sintonizado del paisaje urbano.

Minutos antes una vivencia completamente diferente había accionado sus percepciones. En un acto de contracultura ideológica, bajo estas luces, se metió a la ducha con las medias puestas. No tenia fiebre, ni desvariaba, solo intentaba sentir algo obstruyendo sentir otra cosa. Era claro que los dígitos de las costumbres estaban presentes en la línea argumentativa que pretendía boicotear.

Pensó que solo un animalito podía darse cuenta de lo que significaba eso (una sensación simple animal se hizo presente). Seria mutua e instantánea comprensión, entendimiento. El perro que ha pertenecido a algún "urbanizado darwiniano" como para calzarle zapatitos perrunos, es muy probable que, ya antes, ha padecido, en manos de dicho sujeto, una capa de superhéroe y hasta bigotes acicalados como si fuera un buen perrito jazzista.

Se daba cuenta que tal vez su extravagancia era comprendida o compartida también por el superhéroe, el que se calza los calzoncillos por encima de los pantalones, sin dudas otro gesto de contracultura que deberían practicar agentes de bolsa o gente de traje en general, en un intento de destrabar un poco el gesto diario que visita desde hace décadas los microcentros financieros y económicos del mundo­ -Al decir estas ultima palabras un playmóbil que tiene desde pequeño, mecanografiaba sin detenerse y le salía humito por el bigote-. Si ellos no lo adoptan, al menos seria bueno que los darwinianos de las mascotas sean obligados o inducidos a practicar esta moda de calzoncillos por encima del traje. Otra variante en la contracultura de lo indumental podría ser utilizar las medias por encima de los zapatos o calzados en general; y porque no? la corbata delineando la prolija y elongada columna vertebral, es decir, puesta para atrás, bajando por la espalda.

Lo cierto es que apenas aguantó 5 segundos en la ducha y cuando se quito las medias volvió la comodidad… prprpr se sacudió esas gotas y prosiguió con su ducha. Pero no fue fugaz la sensación que le llevo a creer y sentir, a veces, cuan simples podemos ser. La verdad que lejos de extrañarle la sensación le reconfortó. Lo simple, por lo "complejo" de la cuestión diaria, extrañamente expresa una playvueltita.